Niveles alarmantes de polvo fino en Brandeburgo: ¡la calidad del aire en el punto de mira!
Calidad del aire en Brandenburg an der Havel el 26 de junio de 2025: las mediciones de polvo fino y contaminantes muestran valores y recomendaciones actuales.

Niveles alarmantes de polvo fino en Brandeburgo: ¡la calidad del aire en el punto de mira!
Actualmente, la calidad del aire en Alemania está causando gran revuelo. A medida que se intensifica el debate sobre el polvo fino y la contaminación del aire, los últimos datos de medición pasan cada vez más a primer plano. Son especialmente preocupantes los valores registrados el 26 de junio de 2025 en una estación de medición del campo deportivo Werner-Seelenbinder en Brandenburg an der Havel. Las mediciones muestran un contenido de polvo fino de 100 µg/m³, que se clasifica como “muy malo”. Por lo tanto, se ha superado considerablemente el valor límite de 50 µg/m³ y ya no se pueden respetar las 35 superaciones permitidas al año. Esta es una señal de advertencia para la salud pública, ya que el polvo fino puede provocar o propagar enfermedades respiratorias graves.
¿Pero cuál es la situación general en Alemania? Alto Agencia Federal de Medio Ambiente Las mediciones de polvo fino realizadas desde el año 2000 han demostrado que los valores medios anuales de PM10 en muchas regiones se sitúan entre 15 y 20 µg/m³, habiendo disminuido significativamente desde los años 1990, cuando los valores medios todavía rondaban los 50 µg/m³. Sin embargo, la contaminación sigue siendo alta en las zonas urbanas. Las cifras muestran que el tráfico, la industria y los sistemas de calefacción son las principales causas de las emisiones de polvo fino.
Un desafío integral
La Agencia Alemana de Medio Ambiente (DUH) también ha publicado información alarmante. Una evaluación de los datos sobre la calidad del aire para 2023 encontró que el 99 por ciento de las estaciones de medición superan el límite recomendado por la OMS de 5 µg/m³ para polvo fino. El problema de larga data es particularmente visible en ciudades como Munich y Essen. En cuanto a los niveles de dióxido de nitrógeno, casi un tercio de las estaciones se encuentran incluso por encima del nivel perjudicial para la salud de 10 µg/m³. Esto también tiene un impacto directo en las estadísticas de salud, ya que el DUH estimó que el cumplimiento de los límites de la OMS podría evitar hasta 38.900 muertes prematuras al año en Alemania.
El gobierno federal aún no ha respondido a estos alarmantes datos. El DUH pide posiciones más claras y el cumplimiento de las recomendaciones de la OMS, mientras que Alemania planea abstenerse de futuras negociaciones sobre valores límite en la UE.
Se requiere protección de la salud
No se deben subestimar los efectos sobre la salud de la mala calidad del aire. Según las mediciones actuales, se recomienda evitar el esfuerzo físico al aire libre tanto para valores “muy pobres” como para valores “pobres”. Los grupos de personas sensibles también se ven especialmente afectados y deberían protegerse de pasar demasiado tiempo al aire libre. En este caso no sólo influyen las partículas de polvo fino, sino también otros contaminantes del aire, como los óxidos de nitrógeno. Estos también pueden provocar problemas de salud y, junto con el polvo fino, son motivo de preocupación.
En resumen, la situación muestra que la cuestión del polvo fino y la calidad del aire debe recibir una alta prioridad en el debate político y social. La protección de la salud debe ser la máxima prioridad y requiere medidas que puedan comunicarse con sensatez tanto a nivel local como federal. El desafío es mejorar de manera sostenible la calidad del aire para que el aire que respiramos vuelva a ser seguro. Como sociedad con visión de futuro, sólo nos queda esperar que los responsables tomen las medidas necesarias.