El tribunal desestima la demanda: ¿Festival Jamel sacude al forestal antes del final?
El Tribunal Administrativo de Schwerin desestimó la demanda contra el festival “Jamel rocks the Förster”, mientras persisten las tensiones sobre el contrato de arrendamiento y las condiciones.

El tribunal desestima la demanda: ¿Festival Jamel sacude al forestal antes del final?
El festival “Jamel rocks the Förster” vuelve a estar en el centro de las disputas legales. El Tribunal Administrativo de Schwerin desestimó recientemente la demanda de los organizadores contra exigencias amenazadoras de la autoridad de la asamblea. Este fallo podría tener consecuencias de gran alcance para el evento, que está previsto que se celebre los días 22 y 23 de agosto. Los demandantes, formados por el matrimonio Lohmeyer, IG Metall y DGB Nord, querían evitar una posible prohibición del alcohol después de que el festival fuera registrado como una reunión política. [Ostsee Zeitung]. inadmisible porque aún no se han emitido requisitos específicos por parte de la autoridad asamblearia.
¿Qué hay detrás de este conflicto? Ha causado revuelo el audaz plan del municipio de Gägelow de no ofrecer más gratuitamente sus espacios para el festival. En cambio, se deberá pagar un alquiler de unos 7.800 euros, lo que supondrá una carga considerable para los organizadores. Esto los llevó a emprender acciones legales para hacer valer sus preocupaciones. Sin embargo, según el tribunal aún no está claro si los organizadores tienen derecho a utilizar gratuitamente la zona comunitaria, algo que posiblemente podría aclararse en un proceso posterior. Además, parece que el festival podría estar protegido por la libertad de reunión según el artículo 8 de la Ley Fundamental, lo que complica aún más la situación jurídica. [OLT].
Comunidad y organizador en conflicto
El festival “Jamel rocks the Förster” existe desde 2007 y fue fundado por Horst y Birgit Lohmeyer. Hacen campaña incansablemente contra la toma de su pueblo natal, Jamel, por neonazis y promueven activamente la democracia y la tolerancia en su región, donde sólo el 5 por ciento de la población son nazis no declarados. Para este importante evento se venderán alrededor de 3.000 entradas a un precio de 70 euros cada una. Los ingresos no sólo cubren los gastos del evento, sino que también ayudan a financiar el alquiler y los gastos legales y judiciales, que ascienden a unos 3.000 euros. Según un informe, la asociación "Juntos por la paz y la solidaridad" ha recaudado la impresionante cantidad de 76.000 euros en donaciones a través de la plataforma Betterplace.org para recaudar los fondos necesarios.
Las disputas en torno a este festival plantean dudas sobre la libertad de reunión. De acuerdo con las disposiciones legales, que se tratan, entre otras, en Jura Magazin, es importante respetar el ámbito de protección que incluye a cada alemán. Esta libertad protege el derecho a reunirse sin interrupciones, manteniendo al mismo tiempo ciertas restricciones que pueden aplicarse a tales eventos. La sentencia del tribunal no sólo podría tener una influencia decisiva en el destino del festival, sino que también podría suscitar un importante debate sobre la protección de las reuniones y su marco legal.
Queda por ver si los organizadores volverán a emprender acciones legales a la luz de los acontecimientos actuales. Hasta ahora, los Lohmeyer guardan silencio mientras el municipio y el distrito siguen examinando el marco legal. Una cosa está clara: la situación en torno a “Jamel rocks the forester” sigue siendo apasionante y el próximo evento podría convertirse en escenario no sólo de disputas musicales sino también políticas.