Pegamento climático en los tribunales: ¡sentencias y consecuencias para Chemnitz!
Tres activistas climáticos de la “Última Generación” fueron condenados por coacción en Chemnitz después de intentar pegar a personas en julio de 2023.

Pegamento climático en los tribunales: ¡sentencias y consecuencias para Chemnitz!
El 3 de julio de 2025, tres miembros del controvertido grupo climático “Última Generación” tuvieron que comparecer ante el tribunal de Chemnitz. La acusación fue de coacción, después de que los activistas se atascaran en la calle Zwickauer Strasse en julio de 2023, obstaculizando considerablemente el tráfico. La acción provocó mucho enojo entre los conductores y no fue la primera acción del grupo, cada vez más criticado por sus métodos de protesta. Los acusados rechazaron las órdenes de castigo que se les habían impuesto, lo que finalmente condujo a esta audiencia judicial en la que se emitieron veredictos.
Las penas impuestas variaron: Matthias Schimmich recibió una multa de 300 euros, Alina Joy Richter fue condenada a 240 euros, mientras que Juliane Schmidt, que ya fue condenada en un juicio anterior por un ataque con pintura al Deutsche Bank, tuvo que pagar 800 euros. También estará obligada a pagar las costas del procedimiento. La audiencia judicial brindó a los activistas la oportunidad de presentar numerosas afirmaciones probatorias, incluido el llamado a científicos del clima para respaldar su argumento. Pero el tribunal fue paciente y se tomó su tiempo para tomar una decisión.
Activismo y Justicia
Los acontecimientos que rodean a la “última generación” son parte de una tendencia mucho más amplia. Los activistas del grupo pretenden llamar la atención sobre los problemas urgentes del cambio climático a través de la desobediencia civil. Estas nuevas formas de protesta se perciben de manera muy diferente en la sociedad; Si bien algunos los consideran heroicos, los abogados a menudo los consideran delitos penales. Proyectos de investigación investigar hasta qué punto tales protestas climáticas pueden clasificarse como legales a pesar de violar la ley.
Los recientes veredictos contra activistas climáticos también son el centro de la discusión. Un activista de 65 años de Berlín fue condenado a un año y diez meses de prisión sin libertad condicional. Fue acusado de coacción y resistencia a las fuerzas del orden después de participar en un bloqueo de carreteras. Otro ejemplo por la línea dura adoptada por el poder judicial contra los activistas climáticos.
El debate sobre la protección del clima
Las acciones de la “Última Generación” también plantean cuestiones fundamentales sobre el marco legal y la legitimidad de las acciones de protesta. La necesidad de desviarse de las leyes existentes para llamar la atención sobre los efectos del cambio climático recibe tanto aprobación como duras críticas. Algunos activistas opinan que el poder judicial no está suficientemente preparado para hacer frente a las nuevas formas de protesta y hablan de una "ley penal enemiga". Esta discusión es importante mientras la sociedad se enfrenta a la cuestión de hasta dónde se puede llegar en un Estado constitucional para generar atención para un cambio legítimo y urgente.
Juliane Schmidt, con su historia y las altas penas, no es sólo un caso aislado, sino que es un símbolo del enfoque ambivalente de la sociedad hacia la protección del clima y las protestas asociadas. Las repercusiones legales y los desafíos legales están lejos de terminar.